miércoles, 10 de octubre de 2012

Nota: 191


Miro las gotas caer,
testigos de la vida,
caen sin importar donde caeran,
miro la lluvia sobre mis pies,
mientras el sol sale,
dandole brillo al pasto,
entre los resecos arboles,
ya nadie me cree,
ya la luz no me alumbra,
vivo porque no tengo otra cosa que hacer,
vivo sin un futuro en que creer,
mientras se mojan mis pies,
quedando el frio en mi cuerpo y en mi alma,
veo la sangre otra vez,
y no me doy cuenta cuando me lastimo,
ya no creo ni veo el destino,
ni a ti, nunca mas en mi camino,
veo luz y sombras mezclarse,
dejando la paz inquitarse.

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